De repente oí un vasto y estrondante ruido. eran un caballo, un tatú, y tres cabritas. vinieron en mi dirección, y el miedo me tomó de sorpresa, y mis oídos empezaron a temblar.
Ajude-nos a manter vivo este espaço de descoberta e reflexão, onde palavras tocam corações e provocam mudanças reais.
Garantimos a segurança dos seus dados.
Ao continuar está autorizando o Pensador a enviar conteúdos para o seu e-mail.