46 mensajes para enamorar a una mujer por WhatsApp con ternura

Buenos días, preciosa, ¿cómo amaneció la culpable de mi sonrisa de hoy?

Tengo una lista de cosas que quiero hacer, pero todas empiezan con: hablar contigo.

Hola bonita, ¿te digo un secreto? Mi día mejora cada vez que hablo contigo.

Cada vez que te leo me quedo pensando en qué estarás haciendo… y en cómo sería estar ahí contigo...

Creo que deberías pagar multa por hacer que revise el cel cada cinco minutos, nomás para ver si me escribiste.

Me parece injusto que tengas esa sonrisa y no me la prestes más seguido.

No sé si fue casualidad o destino, pero hablar contigo siempre se siente como un acierto.

Dime la verdad… ¿tienes un pacto con el tiempo? Porque contigo los minutos vuelan cuando hablo contigo.

Buenas noches, que descanses tan lindo como la paz que me das cuando hablamos.

Dicen que todo empieza con un hola… así que hola, y ojalá esto sea el principio de algo especial.

Lo confieso: eres la razón por la que últimamente sonrío sin razón aparente.

No nos conocemos mucho, pero siento que tu vibra ya dice demasiado de lo increíble que eres.

Si me pidieran describir lo que busco, bastaría con decir tu nombre.

Perdona la confianza, pero hay algo en ti que me llamó la atención y tenía que decirlo.

No tengo frases ensayadas, pero contigo me salen ganas de improvisar hasta la eternidad.

A veces me pregunto si tú también sonríes al leerme… porque yo no lo puedo evitar.

No sé en qué momento pasó, pero ya formas parte de lo más bonito que pienso en el día.

Me gustas, así de claro, y cada palabra tuya me convence de que no estoy equivocado.

Eres la primera persona en la que pienso cuando escucho la palabra ‘especial’.

No sé qué fue primero, si tu forma de escribir o la curiosidad que me despiertas.

Hola, vine a alegrarte el chat… me parecía injusto no hacerlo porque tú ya alegraste el mío.

Me doy cuenta de que me gustas porque siempre quiero encontrar excusas para hablarte.

Dime la verdad… ¿me piensas tanto como yo a ti, o solo soy yo el culpable de estas distracciones.

Lo peligroso de ti es que no me canso de imaginar qué pasaría si estuviéramos frente a frente ahora mismo.

A veces creo que tienes un efecto extraño en mí… porque no dejo de pensarte.

Me intriga descubrir si tus abrazos son tan cálidos como imagino.

Tienes esa forma de atraparme que no sé si haces a propósito… pero funciona.

No quiero apresurarte, pero si seguimos hablando así, voy a terminar invitándote a todo lo que me queda de vida.

Es raro hablar con alguien nuevo y sentir tanta conexión desde el inicio.

Creo que lo tuyo conmigo ya no es casualidad… ¿me equivoco?

Si fueras una estrella, serías la más brillante del cielo. Pero prefiero tenerte aquí, iluminando mi vida.

Hay miles de cosas que admiro de ti, y cada día encuentro una nueva.

La verdad es que no hay nadie con quien disfrute tanto hablar como contigo.

No sé si eres consciente, pero me encantas incluso sin intentarlo.

Eres como el café de las mañanas: me despiertas, me llenas de energía y no puedo empezar el día sin pensar en ti.

¿Te has mirado al espejo hoy? Porque deberías saber que estás deslumbrante, como siempre.

Me encanta cómo con solo un mensaje tuyo mi día se llena de colores. Eres mi dosis de felicidad.

Tienes cara de causar problemas... del tipo que me encantaría resolver.

¿Sabes qué es lo mejor de mi día? Saber que puedo hablar contigo.

Me pregunto si eres tan fascinante en persona como lo eres en mi imaginación.

Si tuviera que describirte en una palabra, creo que sería "tentación"...

No quiero parecer intenso… así que solo te diré que mi plan de hoy es pensar en ti y ver si me respondes.

Sabías que mi tipo ideal cambió desde que te vi? Ahora mi tipo es… tú.

No sé si crees en la química, pero la tuya con la mía está empezando a provocar reacciones peligrosas.

Tengo dos noticias: la buena es que me gustas. La mejor es que me encantaría demostrártelo.

No sé si esto es un inicio o una coincidencia, pero contigo todo se siente como una gran historia a punto de comenzar.