28 frases de vino para brindar por la vida, el amor y la amistad


Equipo editorial de Pensador
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El vino, aparte de una bebida, puede ser un maestro de vida. A través de su magia podemos ir desde la paciencia que enseña hasta el amor que inspira. ¡Descubre cómo cada copa encierra lecciones de placer, sabiduría y momentos compartidos que hacen brillar la existencia! Y para capturar su esencia, estas frases son el acompañante perfecto para tus fotos de brindis, atardeceres o encuentros inolvidables.

La vida es demasiado corta para beber mal vino.

Goethe

Un buen vino no requiere prisa, sólo compañía.

El buen vino es una excelente y jovial criatura de Dios, cuando se hace de él un uso moderado"

William Shakespeare

el vino mejora

El vino mejora con la edad. Yo mejoro con el vino.

El vino agrada y el agua enfada.

Con pan y con vino se anda el camino.

El mejor vino no es necesariamente el más caro, sino el que se comparte.

George Brassens

Donde no hay vino no hay amor.

Eurípides

Hay más filosofía y sabiduría en una botella de vino que en todos los libros.

Louis Pasteur

El vino hace la vida más fácil y llevadera, con menos tensiones y más tolerancia.

Benjamin Franklin

Un sorbo de vino y un momento de paz: ésa es la receta de la felicidad.

El secreto de un buen vino es la compañía con la que se brinda.

Entre copas y risas, la vida se suaviza. Un buen vino no requiere prisas, sólo buena compañía.

El amor es como un buen vino: suave al principio, intenso en el medio e inolvidable al final.

El vino ilumina los ojos y calienta el corazón.

En el amor y en el vino, no importa cuánto apures, sino la intensidad de cada sorbo.

viva el buen

Viva el buen vino, que es el gran camarada para el camino.

Pío Baroja

El vino siembra poesía en los corazones.

Dante Alighieri

Dios no hizo más que el agua, pero el hombre hizo el vino.

Víctor Hugo

Un vaso de vino en el momento oportuno vale más que todas las riquezas de la tierra.

Gustav Mahler

La vida, como el vino, no se mide por sus años, sino por su intensidad. Que la tuya deje en el alma el mismo regusto audaz que un buen tinto.

No hay vino sin racimos pisados, ni vida sin dolor. Pero ambos, al final, se convierten en algo por lo que vale la pena brindar.

El vino despierta pasiones dormidas.

Que tu vida sea como una copa de vino siempre medio llena: lo suficiente para celebrar lo vivido, y lo justo para desear más.

El amor, como el vino, mejora con el tiempo… pero solo si se guarda en el silencio de un corazón paciente.

¡Como los buenos vinos, las buenas vivencias dejan un regusto persistente!

Para conocer el origen y la calidad del vino no hay necesidad de beber todo el barril.

Oscar Wilde

Da vino al que tiene amargo el corazón.

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